3ra fecha vs. El Beso del Enzo

Par doble

La mañana del sábado estaba  fresca, muy fresca, en el predio de la UBA, y a la adversidad del horario y el frío, se le sumaron la gran cantidad de bajas que tuvimos, a saber: dos por enfermedad, varios que ya sabíamos que estaban lesionados, y un colorado que vino a hacernos la gamba y le sacaron la roja antes de comenzar el partido.  Todo esto ocasionó la inesperada participación del DT dentro de la cancha.

Lo cierto es que cuando el pito sonó, en el campo de juego había 18 jugadores, nueve de cada lado. Enfiestados trató acomodarse, cauto y con mucha incertidumbre, hacía lo que podía, sabiendo que el rival era de respetar. Los minutos pasaron sin un dominio claro de ambos equipos, el balón, la cenicienta caprichosa, no encontraba su pareja. Los enfiestados estaban tranquilos, sabían que tarde o temprano aparecerían los dos faltantes (Lauta y Coqui) y la cosa cambiaría. Y así fue, con el equipo completo los de amarillo y celeste comenzaron a jugar como saben, con toques, triangulación, pases cortos, seguros, tratando de penetrar a un rival que estaba bien parado. Enfiestados estaba paciente, en la cabeza de cada uno estaba la confianza de que en algún momento iban a quebrar la barrera ofrecida por el adversario. Finalmente Enfie comenzó a inquietar cada vez más, primero con  un pase profundo de JM desde mitad de cancha para Emi jugando de 8, quién desbordó, le pegó cruzado y la pelota besó el palo derecho del arquero, sólo un aviso. Minutos más tarde el rubio de Parque Patricios apareció sorprendiendo por la franja izquierda, enganchó hacia adentro y la ubicó en el primer palo: 1 a 0, y el equipo funcionaba. El beso del Enzo ya desesperanzados de la llegada de refuerzos trató dignamente de llegar al arco rival. Sus dos mayores exponentes, el 10 y el 11, tuvieron a mal traer al mediocampo de Enfie pero ante el repliegue y la doble marca no pudieron avanzar con claridad. Pasando ya la mitad del primer tiempo, uno chiquillo atrevido ubicado en el lateral izquierdo avanzó sin pedir permiso, gambeteando como el matador Kempes, sorprendió a todos con un remate desde 30 mts. que colocó por arriba del improvisado arquero de El beso… Golazo y 2 a 0. La  tranquilidad inundaba al equipo Enfiestados hasta que terminó la primera etapa. Después de un ameno entretiempo, los parciales ganadores se confiaron ante la ventaja en el marcador y en la cantidad de jugadores. Regalaron la pelota al rival, descuidaron la defensa y desanimaron el ataque. Pero Enfiestados es un equipo distinto a otros años, jugando mal puede manejar el partido, jugando sin la pelota puede crear espacios, así llego una jugada del lateral derecho Ale Caño que habilito al Negro para definir con el arco solo y cerrar el score pero el árbitro no vio lo mismo, cobro un off side inexistente, en definitiva eso ocurrió en todo el segundo tiempo. El guardavalla enfiestado sólo tuvo un susto. Hay que seguir por este camino positivo, confiando en que vamos a tener la fortuna que no tuvimos años atrás, pero esta dicha sólo se consigue estando presentes, unidos y por sobretodo ENFIESTADOS.